Esta es una tarta sencilla, pero a su vez, llena de encanto.
Para conmemorar el 50 aniversario de una pareja, que la verdad, son un caso más que raro en éstos días.
Simplemente en blanco y con ese toque de elegancia que le da el dorado.
Toda una vida...50 años juntos...Bodas de oro...
No hay comentarios:
Publicar un comentario